Jeremy Hinzman
es el soldado norteamericano que vive refugiado en Canadá por negarse a ir a Irak.
Sirvió en Afganistán, pero se negó a servir en Irak, sus motivos:
Luego utiliza también el argumento, poco utilizado pero bastante más sincero, de que es la responsabilidad de la gente que vive ahí, el de derrocar el régimen.
Este último es muy poco utilizado porque es mucho más fácil decir que no hay que ir porque es por el petróleo, es por el petróleo y no hace falta pensar más. Así ya no da cargo de conciencia pensar en la cantidad de muertos que produciría un régimen genocida como el de Saddam, es por petróleo y punto.
Pero sería mucho más honrado y honesto decir que no quieres arriesgar ni una sola vida por un pueblo oprimido, que lo hagan ellos. Esto último es ya más difícil, porque ya no se está ejerciendo de buena persona, y ya no podría llamar asesino a los que sí están dispuesto a ello.
Creo que Hinzman tiene todo el derecho del mundo de no ir si no quiere, tiene todo el derecho del mundo a decir que no piensa arriesgar su vida por los iraquíes. No estoy de acuerdo con que tenga que refugiarse en otro país, porque es su opinión y nadie puede obligarle a cambiarla.
Pero yo soy de los que creen que "Para que triunfe el mal, sólo es necesario
que los buenos no hagan nada", frase de Edmund Burke, que además he puesto debajo del título de mi bitácora, porque creo firmemente en esta frase. No haciendo nada, lo único que se consigue es que hayan más Saddames, se conseguirá que más Hitleres invadan más países y maten a más gente.
Afortunadamente hay personas diferentes a Jeremy Hinzman. Me viene a la cabeza el nombre de Pat Tillman; hombre que dejó una prometedora y cómoda vida de futbilista (americano) profesional para jugarse la vida sirviendo a su país.
Desde luego respeto la opinión de Hinzman, pero gente como Tillman está en mi corazón, en el corazón de toda la gente que cree en la libertad y en su patria, y sobre todo, en el corazón de todos lo americanos.
Sirvió en Afganistán, pero se negó a servir en Irak, sus motivos:
I can't walk down the street and start punching guys out because they may potentially rape my wife. I need to wait until the guy's actually going to do it. No matter how scummy he may look or how mean he is to his family. It's great that Saddam's gone, I agree with that. However, like with what's going on in Kyrgyzstan right now with [protests against] President [Askar] Akayev, it's the responsibility of the people who live there to overthrow the bad regime. Because if somebody else goes and does it for them, motive is everything, and they're going to suspect their motives.Utiliza el famoso argumento de que no puede ir pegando a gente, simplemente porque podrían violar a mi mujer, se necesita esperar a que vaya a hacerlo.
Luego utiliza también el argumento, poco utilizado pero bastante más sincero, de que es la responsabilidad de la gente que vive ahí, el de derrocar el régimen.
Este último es muy poco utilizado porque es mucho más fácil decir que no hay que ir porque es por el petróleo, es por el petróleo y no hace falta pensar más. Así ya no da cargo de conciencia pensar en la cantidad de muertos que produciría un régimen genocida como el de Saddam, es por petróleo y punto.
Pero sería mucho más honrado y honesto decir que no quieres arriesgar ni una sola vida por un pueblo oprimido, que lo hagan ellos. Esto último es ya más difícil, porque ya no se está ejerciendo de buena persona, y ya no podría llamar asesino a los que sí están dispuesto a ello.
Creo que Hinzman tiene todo el derecho del mundo de no ir si no quiere, tiene todo el derecho del mundo a decir que no piensa arriesgar su vida por los iraquíes. No estoy de acuerdo con que tenga que refugiarse en otro país, porque es su opinión y nadie puede obligarle a cambiarla.
Pero yo soy de los que creen que "Para que triunfe el mal, sólo es necesario
que los buenos no hagan nada", frase de Edmund Burke, que además he puesto debajo del título de mi bitácora, porque creo firmemente en esta frase. No haciendo nada, lo único que se consigue es que hayan más Saddames, se conseguirá que más Hitleres invadan más países y maten a más gente.
Afortunadamente hay personas diferentes a Jeremy Hinzman. Me viene a la cabeza el nombre de Pat Tillman; hombre que dejó una prometedora y cómoda vida de futbilista (americano) profesional para jugarse la vida sirviendo a su país.
Desde luego respeto la opinión de Hinzman, pero gente como Tillman está en mi corazón, en el corazón de toda la gente que cree en la libertad y en su patria, y sobre todo, en el corazón de todos lo americanos.
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